Por: Ana Peguero
El creador de la famosa y controversial caricatura “Diógenes y Boquechivo”, Harold Priego, se autodenomina como un profesional imparcial que nunca ha hecho vida pública, con lo que envía un mensaje muy claro a la sociedad: no necesito un cheque del gobierno para acallarme.
Harold Priego, dominicano, calificado como “el monstruo de las caricaturas nacionales”, por su gran habilidad y creatividad para hacer sus pinturas que se publican diariamente en cuatro periódicos locales.
En Diario Libre, Harold publica diariamente a “Diógenes y Boquechivo”; en El Caribe, a “Matías y Berroa”, en el Listín Diario, a “Doña Mármara y su inofensivo marido Don Chichí”, y en el periódico Hoy, “Eloy en Hoy”.
Su obra maestra, Diógenes y Boquechivo, es un personaje inspirado en la realidad social dominicana. Son una combinaciones de la filosofía sin escuela y la sabiduría aprendida de las situaciones cotidianas; unos protagonistas que “con sus cualidades y características hacen sentir como si estuviéramos frente a dos seres con vida propia”.
A continuación le dejamos con la entrevista íntegra al caricaturista Harold Priego:
P.:¿Como valora el crecimiento del periodismo de opinión de caricatura en nuestro país?
R.:“Yo pienso que el periodismo de opinión depende mucho de la situación política que se curse en ese momento en el país. Por ejemplo, en la época de Balaguer yo te puedo decir que sería muy difícil que Diógenes y Boquechivo existiera, porque aquí mataban a cualquiera por menos cosas de las que yo he dicho; todo depende de la “democracia” y de la forma que ha evolucionado políticamente. También de los presidentes que hemos tenido, que han sabido aceptar de una forma jocosa las cosas que yo digo en mis caricaturas”.
P.:¿Por esa respuesta podríamos interpretar que Diógenes y Boquechivo es meramente político?
R.:“Humor es una palabra muy amplia. Puede ser humor sencillo, humor familiar, marital, pero lo que yo hago básicamente es humor político, porque es el humor que el dominicano más practica; todos los dominicanos somos políticos, hablamos de política, damos opiniones. A veces tu sientes que el que da una opinión lo hace con una gran capacidad de síntesis, al punto de que podemos interpretar que esa persona es un politólogo, pero que va, es que los dominicanos somos así”.
P.:¿Cuál ha sido el aporte de la caricatura como género al desarrollo del periodismo de opinión?
R.:“Tiene varias vertientes. Una cosa es la visualización diferente de la opinión textual, la gente da mucha opinión escrita. Cuando tu ves la opinión que yo he dado que es una opinión gráfica a la gente le llama la atención, sobre todo porque hubo un letargo que empezó en la época de Cachafú, que es una revista de opinión política que se hacía aquí, en la que muchas veces tú tenías que manejar esa opinión política, porque habían muchas opiniones adversas en la época de Balaguer y, entonces, tú sabes cuales eran las consecuencias. La opinión gráfica ha venido a resaltar, a romper ese hielo, y poder dar una opinión política gráfica con la cual lo que busco es la risa”.
P.:¿En su caricatura, es objetivo o tiene alguna preferencia política?
R.:“Jamás me lo digas. Trato de ser imparcial, mantenerme siempre dentro de la imparcialidad sobre todas las cosas. Son pendejadas mías, no se si masturbaciones pendejas, pero no ha llegado el precio que me ha comprado. No tengo la necesidad de eso. Déjame decirte algo: yo lo que estudié fue arquitectura, o sea, vengo de un sector totalmente privado de la economía y lo que fui toda la vida hasta hace cinco años fue publicista, siempre me maneje en el sector privado, o sea que la vida publica nunca la he ejercido, por lo que no tengo la necesidad de tener un cheque del gobierno. Gracias a Dios y por consiguiente mis opiniones siempre son imparciales, me da lo mismo que si Hipólito, que si Leonel, hasta ahora”.
P.:¿Desde cuando incursiona Harold Priego en el mundo de la caricatura?
R.:Inicie, o sea, mis pininos como caricaturista, fue siendo publicista, trabajando en Pages, cuando Molina Morillo me llamó (muy amigo mío y de mi familia desde hace años), y ahí fue que surgió el primer personaje que se llamaba Don Bartolo, personaje estudiado entre Molina Morillo y yo; pero, qué sucede? Que cuando tú estudias los personajes y lo predispones hacia una actitud o fenotipo, una causa social, hacia una forma de pensar, te salen frío y eso fue lo que pasó. Entonces, hacer humor con un solo personaje era muy difícil, tenía que buscar dos personajes colaterales que lo ayudara por lo que surgió, de forma espontánea, Diógenes y Boquechivo, que eran dos antagónicos, uno ingenuo y otro un seudo filósofo”.
P.:¿Es precisamente con Diario Libre que arranca Diógenes y Boquechivo?
R.:“Vamos a decir que a nivel de personajes sí arranca en Diario Libre. Ellos creyeron mucho en mí, al punto de que tienen una estatua de Diógenes y Boquechivo en la entrada del periódico”.
P.:¿El desarrollo de Diógenes y Boquechivo se debe a que se publica por Diario Libre?
R.:“Básicamente si, el boom se debe a ellos, sobre todo por que es un periódico gratis que llega a la gente que no tiene dinero para comprar un periódico; el periódico ayuda mucho ya que es un periódico interesante, que te presenta un panorama local amplio”.
P.:¿La línea que sigue Diógenes y Boquechivo se corresponde con la del periódico?
R.:“No, definitivamente, no. Una cosa es la línea periodística y otra es la personal que tiene el periódico por sus intereses de sus inversionistas”.
P.:¿Es o ha sido censurada la caricatura de Diógenes y Boquechivo?
R.:“En un 99% no. Hay un 1% que yo me guardo la reserva”
P.:¿Debe de pasar por un filtro Diógenes y Boquechivo antes de ser publicada?
R.:“Sí, todas las caricaturas deben pasar por un filtro que es el director, pero la libertad que él me da (Adriano Miguel Tejada) es plena. Al igual que los directores de los demás periódicos para los que yo trabajo”.
P.:¿En qué se basa Harold Priego para elegir el tema de la caricatura cada día?
R.:“Lo que yo busco es el tema del día o el tema del momento; a veces los temas del momento me producen una hilaridad, porque yo lo que persigo es un chiste; a veces hay cosas del momento que son aburridas desde el punto de vista humorístico, por lo que hago cosas fuera de eso para rellenar el espacio. Cosas como préstamos, procesos judiciales, temas de tragedias sociales. Tengo que basarme en el concepto, pero a veces irme fuera de la idea. Luego de tener el texto hago el dibujo a mano y lo escaneo”.
P.:¿Cuál es el aporte de esta caricatura a la sociedad?
R.:“Es una buena pregunta. El hecho de que me recuerden es un asunto que tiene que ver mucho con tu formación; a veces, cuales son los intereses que tu tienes como persona, que es lo que te satisface sin tener un buen vehículo, una buena cuenta de banco o tener un interés social, que la gente sienta que tienen una persona que está haciendo un poquito de guerra social. Sin lo social yo no existiría; yo estoy siendo una especie de voz que llama en el desierto”.
P.:¿Por qué nace Diógenes y Boquechivo?
R.:“Nació por una necesidad que tengo yo adentro de decir las cosas, quizás como esa rebeldía que tenemos desde niño, pero mezclada con humor. A veces me asombro de donde han llegado esos personajes, que no fueron creados con el objetivo de llamar tanto la atención como lo están haciendo, y encuentro que está llamando la atención, porque yo estoy logrando el idioma común y corriente, el concepto general, la forma de pensar que tiene la gente en cualquiera de las cosas del desenvolvimiento público; se comunican con lo que dice la caricatura”.
P.:¿Cuáles son las características de cada uno de los personajes?
R.:“Diógenes es un personaje muy complicado, intelectualmente hablando, es un mendigo filósofo y contradictor de todo; Boquechivo es más light, ingenuo, humilde, sin escuela, pero buena gente. Con el tiempo descubrí que Diógenes y Boquechivo tienen vida propia, una verdadera forma de pensar y de sentir. A veces siento que estoy loco por matarlos”.
P.:¿Que temas le faltan a Diógenes y Boquechivo?
R.:“Yo respeto mucho cosas que aglomeren opinión, por ejemplo, los problemas raciales, haitianos, problemas religiosos, de alto nivel social, problemas que son tabúes”.
P.:¿Es racista Harold Priego?
R.:“Sí, pero mi racismo no es por el color de la piel, sino por el color de la conciencia; los haitianos tienen la conciencia muy negra, además, hay una historia de cinco invasiones, llevamos eso por dentro, aunque yo creo que ellos son más racistas que nosotros”.
P.:¿Ha juzgado Diógenes y Boquechivo erróneamente alguna vez los temas que trata?
R.:“Claro que sí, por supuesto, eso es un asunto de opinión, ya que la opinión del gobierno, de lo que yo estoy diciendo, no será la misma de la oposición y viceversa”.
P.:¿Cual ha sido el año de mayor esplendor y desarrollo de Diógenes y Boquechivo?
R.:Definitivamente el 2007: Mayor aceptación, página en Internet y las tiras por televisión.
Harold Priego, dominicano, calificado como “el monstruo de las caricaturas nacionales”, por su gran habilidad y creatividad para hacer sus pinturas que se publican diariamente en cuatro periódicos locales.
En Diario Libre, Harold publica diariamente a “Diógenes y Boquechivo”; en El Caribe, a “Matías y Berroa”, en el Listín Diario, a “Doña Mármara y su inofensivo marido Don Chichí”, y en el periódico Hoy, “Eloy en Hoy”.
Su obra maestra, Diógenes y Boquechivo, es un personaje inspirado en la realidad social dominicana. Son una combinaciones de la filosofía sin escuela y la sabiduría aprendida de las situaciones cotidianas; unos protagonistas que “con sus cualidades y características hacen sentir como si estuviéramos frente a dos seres con vida propia”.
A continuación le dejamos con la entrevista íntegra al caricaturista Harold Priego:
P.:¿Como valora el crecimiento del periodismo de opinión de caricatura en nuestro país?
R.:“Yo pienso que el periodismo de opinión depende mucho de la situación política que se curse en ese momento en el país. Por ejemplo, en la época de Balaguer yo te puedo decir que sería muy difícil que Diógenes y Boquechivo existiera, porque aquí mataban a cualquiera por menos cosas de las que yo he dicho; todo depende de la “democracia” y de la forma que ha evolucionado políticamente. También de los presidentes que hemos tenido, que han sabido aceptar de una forma jocosa las cosas que yo digo en mis caricaturas”.
P.:¿Por esa respuesta podríamos interpretar que Diógenes y Boquechivo es meramente político?
R.:“Humor es una palabra muy amplia. Puede ser humor sencillo, humor familiar, marital, pero lo que yo hago básicamente es humor político, porque es el humor que el dominicano más practica; todos los dominicanos somos políticos, hablamos de política, damos opiniones. A veces tu sientes que el que da una opinión lo hace con una gran capacidad de síntesis, al punto de que podemos interpretar que esa persona es un politólogo, pero que va, es que los dominicanos somos así”.
P.:¿Cuál ha sido el aporte de la caricatura como género al desarrollo del periodismo de opinión?
R.:“Tiene varias vertientes. Una cosa es la visualización diferente de la opinión textual, la gente da mucha opinión escrita. Cuando tu ves la opinión que yo he dado que es una opinión gráfica a la gente le llama la atención, sobre todo porque hubo un letargo que empezó en la época de Cachafú, que es una revista de opinión política que se hacía aquí, en la que muchas veces tú tenías que manejar esa opinión política, porque habían muchas opiniones adversas en la época de Balaguer y, entonces, tú sabes cuales eran las consecuencias. La opinión gráfica ha venido a resaltar, a romper ese hielo, y poder dar una opinión política gráfica con la cual lo que busco es la risa”.
P.:¿En su caricatura, es objetivo o tiene alguna preferencia política?
R.:“Jamás me lo digas. Trato de ser imparcial, mantenerme siempre dentro de la imparcialidad sobre todas las cosas. Son pendejadas mías, no se si masturbaciones pendejas, pero no ha llegado el precio que me ha comprado. No tengo la necesidad de eso. Déjame decirte algo: yo lo que estudié fue arquitectura, o sea, vengo de un sector totalmente privado de la economía y lo que fui toda la vida hasta hace cinco años fue publicista, siempre me maneje en el sector privado, o sea que la vida publica nunca la he ejercido, por lo que no tengo la necesidad de tener un cheque del gobierno. Gracias a Dios y por consiguiente mis opiniones siempre son imparciales, me da lo mismo que si Hipólito, que si Leonel, hasta ahora”.
P.:¿Desde cuando incursiona Harold Priego en el mundo de la caricatura?
R.:Inicie, o sea, mis pininos como caricaturista, fue siendo publicista, trabajando en Pages, cuando Molina Morillo me llamó (muy amigo mío y de mi familia desde hace años), y ahí fue que surgió el primer personaje que se llamaba Don Bartolo, personaje estudiado entre Molina Morillo y yo; pero, qué sucede? Que cuando tú estudias los personajes y lo predispones hacia una actitud o fenotipo, una causa social, hacia una forma de pensar, te salen frío y eso fue lo que pasó. Entonces, hacer humor con un solo personaje era muy difícil, tenía que buscar dos personajes colaterales que lo ayudara por lo que surgió, de forma espontánea, Diógenes y Boquechivo, que eran dos antagónicos, uno ingenuo y otro un seudo filósofo”.
P.:¿Es precisamente con Diario Libre que arranca Diógenes y Boquechivo?
R.:“Vamos a decir que a nivel de personajes sí arranca en Diario Libre. Ellos creyeron mucho en mí, al punto de que tienen una estatua de Diógenes y Boquechivo en la entrada del periódico”.
P.:¿El desarrollo de Diógenes y Boquechivo se debe a que se publica por Diario Libre?
R.:“Básicamente si, el boom se debe a ellos, sobre todo por que es un periódico gratis que llega a la gente que no tiene dinero para comprar un periódico; el periódico ayuda mucho ya que es un periódico interesante, que te presenta un panorama local amplio”.
P.:¿La línea que sigue Diógenes y Boquechivo se corresponde con la del periódico?
R.:“No, definitivamente, no. Una cosa es la línea periodística y otra es la personal que tiene el periódico por sus intereses de sus inversionistas”.
P.:¿Es o ha sido censurada la caricatura de Diógenes y Boquechivo?
R.:“En un 99% no. Hay un 1% que yo me guardo la reserva”
P.:¿Debe de pasar por un filtro Diógenes y Boquechivo antes de ser publicada?
R.:“Sí, todas las caricaturas deben pasar por un filtro que es el director, pero la libertad que él me da (Adriano Miguel Tejada) es plena. Al igual que los directores de los demás periódicos para los que yo trabajo”.
P.:¿En qué se basa Harold Priego para elegir el tema de la caricatura cada día?
R.:“Lo que yo busco es el tema del día o el tema del momento; a veces los temas del momento me producen una hilaridad, porque yo lo que persigo es un chiste; a veces hay cosas del momento que son aburridas desde el punto de vista humorístico, por lo que hago cosas fuera de eso para rellenar el espacio. Cosas como préstamos, procesos judiciales, temas de tragedias sociales. Tengo que basarme en el concepto, pero a veces irme fuera de la idea. Luego de tener el texto hago el dibujo a mano y lo escaneo”.
P.:¿Cuál es el aporte de esta caricatura a la sociedad?
R.:“Es una buena pregunta. El hecho de que me recuerden es un asunto que tiene que ver mucho con tu formación; a veces, cuales son los intereses que tu tienes como persona, que es lo que te satisface sin tener un buen vehículo, una buena cuenta de banco o tener un interés social, que la gente sienta que tienen una persona que está haciendo un poquito de guerra social. Sin lo social yo no existiría; yo estoy siendo una especie de voz que llama en el desierto”.
P.:¿Por qué nace Diógenes y Boquechivo?
R.:“Nació por una necesidad que tengo yo adentro de decir las cosas, quizás como esa rebeldía que tenemos desde niño, pero mezclada con humor. A veces me asombro de donde han llegado esos personajes, que no fueron creados con el objetivo de llamar tanto la atención como lo están haciendo, y encuentro que está llamando la atención, porque yo estoy logrando el idioma común y corriente, el concepto general, la forma de pensar que tiene la gente en cualquiera de las cosas del desenvolvimiento público; se comunican con lo que dice la caricatura”.
P.:¿Cuáles son las características de cada uno de los personajes?
R.:“Diógenes es un personaje muy complicado, intelectualmente hablando, es un mendigo filósofo y contradictor de todo; Boquechivo es más light, ingenuo, humilde, sin escuela, pero buena gente. Con el tiempo descubrí que Diógenes y Boquechivo tienen vida propia, una verdadera forma de pensar y de sentir. A veces siento que estoy loco por matarlos”.
P.:¿Que temas le faltan a Diógenes y Boquechivo?
R.:“Yo respeto mucho cosas que aglomeren opinión, por ejemplo, los problemas raciales, haitianos, problemas religiosos, de alto nivel social, problemas que son tabúes”.
P.:¿Es racista Harold Priego?
R.:“Sí, pero mi racismo no es por el color de la piel, sino por el color de la conciencia; los haitianos tienen la conciencia muy negra, además, hay una historia de cinco invasiones, llevamos eso por dentro, aunque yo creo que ellos son más racistas que nosotros”.
P.:¿Ha juzgado Diógenes y Boquechivo erróneamente alguna vez los temas que trata?
R.:“Claro que sí, por supuesto, eso es un asunto de opinión, ya que la opinión del gobierno, de lo que yo estoy diciendo, no será la misma de la oposición y viceversa”.
P.:¿Cual ha sido el año de mayor esplendor y desarrollo de Diógenes y Boquechivo?
R.:Definitivamente el 2007: Mayor aceptación, página en Internet y las tiras por televisión.
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